

Escuchar es la antesala de una buena decisión
Internet nos permite intercambiar ideas en tiempo real, conectar con otras personas, escuchar y ser escuchados. Con esa idea nace este blog. Desde la humildad de quien se inicia en el mundo 'bloggero', quiero decirte que estoy aquí para contarte mis reflexiones sobre este apasionante mundo que es la política. Quiero hablarte de mi Galicia y de mi Coruña y de cómo las veo. Pero, quiero saber cómo lo ves tú y que me cuentes tus impresiones. Te invito a establecer un diálogo, a que participes; a que expreses tu punto de vista, con total y absoluta libertad; criticando, si te parece; apoyando, si lo crees necesario. Hagamos de este blog un punto de encuentro. Las puertas están abiertas. Bienvenid@ amig@ y gracias por detener tu mirada en esta sencilla choza.
Carlos Negreira.
2 comentarios:
Me gusta verle por la ciudad, 'pateándose' barrio a barrio. Dicen que quien la persigue la consigue, no dudo que con su presencia en la calle y con su constancia, será el nuevo alcalde de La Coruña. El alcalde que nos merecemos.
Ánimo y siga así.
* La semana pasada tuve que ir a POCOMACO en dos ocasiones y esta mal aquello, pero ¿Es culpa del Alcalde? o lo es de la empresa que ha realizado los trabajos. Sí es culpa del Concejal de Turno, pues hagan lo que tienen que hacer: Exigir responsabilidades, cómo el caso del Edificio "Conde de Fenosa". Parece que el Alcalde y demás Concajales se quieren lavar las manos. El Sr. Moreda dice que él propuso lo que le señalaron los técnicos ¿Serán los técnicos los corruptos? Pero el Sr. Moreda (su equipo, su personal) autorizó a tirar un tabique de cierre en un edificio sin saber sí existía autorización por parte de la Comunidad para ello. El propietario del local, haciendo uso del permiso municipal, tiro el tabique para unir dos locales, de dos edificios diferentes, lo que provocó tener que ir a juicio. Parece que los funcionarios y técnicos municipales no conocen las Leyes. En su caso deberían autorizar la cuestión, siempre que se cumplan los demás requisitos, que por supuesto, no se cumplían.
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