Pleno descafeinado

El Pleno municipal de A Coruña en el mes de diciembre ha estado, una vez más, bastante descafeinado. El Gobierno municipal solamente ha llevado un asunto y, si analizamos los últimos plenos, la verdad es que en los últimos meses no se puede decir que hayan trabajado mucho.

El Grupo municipal del PP ha presentado dos mociones que han sido rechazadas por el bipartito municipal: la declaración de Zona Especial de Protección de los Jardines de Méndez Núñez para lograr que la Xunta de Galicia declare este espacio emblemático de la ciudad como Bien Especial de Protección y la propuesta de elaborar un Plan de Realojos de los vecinos que residen en infraviviendas en diversas zonas de la ciudad y que llevan muchos años esperando la ayuda municipal para resolver su situación.

El Pleno se animó al final con las preguntas orales que planteamos:

1.- En primer lugar preguntamos sobre las situación del Aeropuerto de Alvedro, ya que en este año hemos asistido a una gran reducción de pasajeros, 20.000 viajeros menos de ida por mes si lo comparamos con el 2007, y han aumentado las incidencias, cancelaciones y desvíos a otros aeropuertos gallegos, así como la pérdida de competitividad de nuestro aeropuerto provocada por los altos precios de los vuelos desde A Coruña, un 50% más caros que desde Santiago o Vigo. Después de la marcha de Easy Yet, y la drástica reducción de los vuelos de Iberia y Spanair, el último episodio lo ha realizado la TAP portuguesa, que ha reducido de seis a uno sus vuelos con Lisboa, y lo que es más preocupante, la antesala de la noticia de nuevas cancelaciones como el vuelo a Sevilla, que esperamos no se confirme.

2.- En segundo lugar interrogamos al alcalde por la increible situación del recién inaugurado Centro Cívico de Los Rosales, que después de que Losada se haya gastado 3,6 millones de euros, no funciona la calefacción, ni tienen libros en la biblioteca.

3.- Por último, preguntamos por la situación de la reforma de La Marina, proyecto aprobado en Marzo de 2007, dos meses antes de las elecciones, y que continúa paralizado a día de hoy. Los vecinos de la ciudad vieja tienen un panorama muy preocupante a corto plazo: no saben si se va a construir el parking del Parrote, no saben si se va a construir el Parking de la Marina y, con el proceso de peatonalización de su barrio, disminuyen las plazas de aparcamiento en superficie.