jueves, 16 de abril de 2009

Más celeridad para las obras del aparcamiento del Parrote y la reforma de La Marina


Una ciudad como La Coruña no puede permitirse tener paralizadas unas obras de la importancia del aparcamiento del Parrote y la reforma de La Marina. Es algo que no nos podemos permitir por más tiempo. Las últimas declaraciones de Carmen Marón demuestran lo que desde el PP coruñés venimos denunciando en los ultimos años, que el Gobierno Municipal no es capaz de ejecutar los proyectos que presenta, que carecen de voluntad y de peso político, y que son incompetentes para cumplir lo que prometen.

Por ello nos parece muy grave que ahora la edil socialista diga que la reforma la Marina se ha paralizado hasta ver con más claridad lo que ocurre en el Parrote, una obra que ya acumula más de un año de retraso y que, con relación al aparcamiento del Parrote reconozca que hay que ganar el tiempo perdido, ya que durante los cuatro años de Gobierno del Bipartito en la Xunta y del Gobierno Central, el alcalde ha sido incapaz de conseguir que su agilicen todos los informes pendientes, provocando que el socavón del Parrote ya se haya convertido en un punto de encuentro para los sorprendidos turistas que visitan la ciudad. Esa no es la imagen que yo quiero que se lleven los que visitan nuestra ciudad.

Estas actuaciones son el mejor ejemplo de la política de Losada, la política basada en las continuas promesas y en los reiterados incumplimientos con los que Losada gobierna esta ciudad. Este es un gobierno cuya especialidad es presentar maquetas y luego echarle la culpa a terceros; en buscar excusas para ocultar su incapacidad para conseguir financiación y para agilizar las obras realmente importantes para los coruñeses.

Esto es algo que Coruña, la ciudad que nosotros queremos para nuestros hijos, no se puede permitir.

1 comentario:

Marcos Pita Varela dijo...

El gobierno municipal de La Coruña nunca ha sabido qué hacer con esta céntrica zona de nuestra ciudad.

Los coruñeses lo sabemos muy bien, porque lo hemos padecido: desde el megalómano Proyecto Bofill de mediados de los '80, pasando por el dicutible Palexco-Centro de Ocio, hasta llegar al elenco de maquetas para La Marina y al parking socavón que afea la más típica estampa de La Coruña desde hace ya demasiado tiempo.

Mucho me tememo que la desafectación de los terrenos portuarios lleva camino de convertirse en una nueva chapuza para nuestra fachada marítima si seguimos encargando el futuro de nuestra ciudad a quienes han acreditado ser, durante más de un cuarto de siglo, Licenciados en improvisación, opacidad y despilfarro del dinero público.